Gestionar una herencia no tiene por qué ser un camino lleno de incertidumbres. Muchas familias en Gran Canaria se encuentran perdidas al recibir una vivienda heredada: trámites, impuestos, tiempos, decisiones… Por eso he preparado esta guía sencilla con buenas prácticas para que cualquier heredero pueda organizarse, evitar errores y avanzar con tranquilidad.

1. Reunir la documentación básica desde el principio

Antes de tomar decisiones, conviene disponer de:

• Certificados de defunción y últimas voluntades
• Copia del testamento o acta de declaración de herederos
• Escrituras y recibos relevantes del inmueble
• Último IBI y notas simples actualizadas

Tenerlo ordenado agiliza todo lo que viene después, especialmente si hay intención de vender la vivienda heredada.

2. Valorar la vivienda con un profesional local

Uno de los errores más comunes es usar valoraciones aproximadas o desactualizadas.
En Gran Canaria, el mercado cambia según el barrio y el tipo de vivienda; por eso es recomendable:

• Obtener una valoración realista y actual
• Analizar si conviene hacer pequeñas mejoras
• Saber qué se puede esperar en términos de precio y tiempos

Una valoración correcta ayuda también a tomar decisiones fiscales y patrimoniales con más seguridad.

3. No dejar pasar plazos fiscales

El Impuesto de Sucesiones y Donaciones y la plusvalía municipal tienen plazos concretos.
Cumplirlos evita recargos y problemas posteriores.
Si los herederos planean poner el inmueble en venta, es importante coordinar bien estos plazos con los pasos posteriores.

4. Acordar una estrategia común entre todos los herederos

Cuando hay varios herederos, lo mejor es fijar:

• Quién se encargará de los trámites
• Qué se hará con la vivienda
• Cómo se gestionarán los gastos
• Qué expectativas tiene cada parte

Una breve reunión inicial (o incluso por videollamada) suele evitar muchos malentendidos.

5. Contar con un mediador profesional cuando sea necesario

A veces los herederos tienen visiones diferentes. Para evitar bloqueos, funciona muy bien contar con:

• Un agente inmobiliario neutral
• Un asesor fiscal que explique las opciones
• Un profesional que organice la documentación y mantenga el proceso en marcha

Mi experiencia como agente inmobiliario en Gran Canaria especializado en herencias demuestra que una figura profesional externa acelera y pacifica enormemente todo.

6. Si se va a vender: preparar la vivienda correctamente

La primera impresión importa, y en la venta de viviendas heredadas aún más.
Recomiendo:

• Despejar y limpiar bien
• Retirar objetos personales
• Revisar pequeños detalles (pintura, bombillas, cierres)
• Realizar un reportaje fotográfico profesional

Esto puede suponer una diferencia de miles de euros en el precio final y reduce el tiempo en el mercado.

7. Elegir un profesional que conozca las particularidades de las herencias

Vender una vivienda heredada tiene matices: documentación, coordinación entre herederos, posibles usufructos, liquidación de impuestos…
Trabajar con alguien que domina este tipo de operaciones en Gran Canaria evita retrasos y garantiza un proceso sin sobresaltos.

Conclusión

Una herencia bien gestionada puede convertirse en una oportunidad para la familia, no en una fuente de tensiones.
Planificar, dejarse acompañar por profesionales y avanzar paso a paso es la clave para llegar a buen puerto.

Si es tu caso y quieres una orientación clara, sin compromiso, estaré encantado de ayudarte a valorar la vivienda heredada y a guiarte en todo el proceso.