¿Te mudas? ¡Qué ilusión! La mudanza a una nueva casa es un momento ilusionante, claro que sí, pero también puede ser un agobio y un estrés innecesario. Aplica estos consejos y todo irá como la seda.
1.- Empieza por el principio: Cambia la titularidad de los contratos de suministros de agua y electricidad. Hazlo cuanto antes. Si acabas de comprar, con la copia simple de las escrituras es suficiente, y suele ser posible hacerlo incluso por teléfono. No te retrases, y pacta con el vendedor que no de de baja los contratos, ya que es mucho más sencillo un cambio de titular que un alta nueva. Comprueba las ofertas de diversas compañías para que elijas la más ventajosa.
2.- Configura tu nueva dirección en tu banco, administraciones públicas, plataformas digitales, suscripciones, y en definitiva, todos aquellos lugares donde hayas aportado tu dirección con anterioridad. Pon especial cuidado con las administraciones públicas, como Tráfico, Hacienda, Seguridad Social…
3.- Parece obvio, pero… no olvides cambiar todas las cerraduras exteriores de tu nueva casa. La tranquilidad y la seguridad, por encima de todo.
4.- Pintar, empapelar, pequeños arreglos… hazlos todos antes de trasladar tus muebles y demás efectos personales, ya que podrás hacerlo con mayor comodidad, y evitarás causar daños a tu apreciado mobiliario u objetos personales. Además, recuerda que los colores claros dan más sensación de amplitud a tu vivienda.
5.- Limpieza a fondo. Si es antes de amueblar, mucho mejor. Lo suyo sería después de pintar. Aprovecha que el ánimo está alto, y empleate a fondo en la cocina, baño, ventanas, persianas, altillos de roperos y armarios… En definitiva, dale un buen repaso a todo. Luego, con los muebles, no será tan fácil.
6- La mudanza es un buen momento para deshacerte de todas aquellas cosas que, en realidad, ni necesitas ni quieres. Aprovecha este momento, y deshazte de ellas. Dónalas si crees que puede ser de utilidad a alguien, o si no, tíralas en el contenedor de reciclaje apropiado, o en el punto limpio más cercano. No te lleves a casa cosas viejas que no usas.
7.- Empadrónate en tu nueva vivienda. Te dará acceso a multitud de servicios municipales, y además es obligatorio para algunos trámites, ayudas y subvenciones a las que podrías tener derecho. Ten siempre tu situación burocrática en orden. Una vez lo hayas hecho, conviene comunicarlo a las siguientes administraciones públicas, por si acaso no se haga de forma automática:
La Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT).
El Instituto Nacional de la Seguridad Social.
La Tesorería de la Seguridad Social.
La Dirección General de Policía (DGP).
Y por último, sólo si crees que debes hacerlo, comunica tu nuevo domicilio a amigos y familiares. Y listo, a disfrutar de tu nuevo hogar.
Y evidentemente, recuerda comunicar tu cambio de domicilio a tus amigos y familiares. ¡Y ya tendrás todo listo para empezar tu nueva etapa!
Imagen de standret en Freepik
